Apreciados Jesús y ex apostólicos: Con motivo de estas fiestas navideñas, aunque un poco alteradas, deseamos abundantes bendiciones del Niño Dios para cada uno de vosotros y todas vuestras familias.
Que el espíritu navideño y vicenciano aumente nuestro amor a los pobres y necesitados para saber compartir todo lo que el Señor generosamente nos regala.